Pensilvania abre sus carreteras a los vehículos autónomos, pero con estas condiciones
10/31/2024 01:14 PM
Pensilvania se prepara para un nuevo avance en materia de movilidad con la implementación de nuevas pautas para la circulación de vehículos altamente automatizados (HAV, por sus siglas en inglés) en sus rutas. Estas nuevas reglas, anunciadas por el Departamento de Transporte del Estado de Pensilvania (PennDOT), permitirán por primera vez que estos vehículos sin conductor puedan operar sin necesidad de un chofer físico en el asiento. Estas pautas fueron diseñadas para garantizar un espacio regulado y seguro para la operación de este tipo de tecnología en el estado.
Los vehículos altamente automatizados representan un avance importante en la industria del transporte, ya que cuentan con la capacidad de operar de manera autónoma en diversas condiciones. Con estas nuevas disposiciones, se abre la puerta para que las empresas certificadas pongan a prueba estos vehículos en las rutas estatales, siempre bajo las condiciones establecidas por las autoridades correspondientes.
Certificación y requisitos de seguridad
Uno de los puntos clave de las nuevas pautas es la Certificación de Cumplimiento, que exige que cualquier entidad interesada en operar un HAV en Pensilvania obtenga previamente un certificado otorgado por PennDOT. Este documento, como informa PA Homepage, asegura que los vehículos cumplan tanto con las leyes estatales como con las directrices específicas, contenidas en laPublicación 950, que regula la operación segura de estos automóviles.
Además, las empresas deben presentar un Plan de Gestión de Seguridad, el cual debe incluir detalles sobre el diseño del vehículo, las medidas de seguridad implementadas y, si es necesario, la capacitación de los operadores humanos.
Estos pasos son esenciales para garantizar que la circulación de estos vehículos no represente un riesgo para los usuarios de las carreteras. "A medida que avanza la tecnología, como los vehículos sin conductor, Pensilvania se mantiene a la vanguardia en lo que respecta a garantizar la seguridad pública con un proceso de regulación y certificación", afirmó el secretario de PennDOT, Mike Carroll.
Operación remota y colaboración con los municipios
Otro aspecto destacado de las nuevas pautas es la posibilidad de que los vehículos automatizados puedan ser operados de forma remota. Esta innovación permitirá que los operadores controlen los vehículos desde ubicaciones externas, algo que brindará mayor flexibilidad a las empresas que utilicen esta tecnología. No obstante, las autoridades estatales impusieron la obligación de notificar a las municipalidades locales con al menos 10 días de antelación antes de comenzar cualquier operación de HAV en una jurisdicción determinada.
La coordinación entre los operadores y las autoridades locales será clave para garantizar que la implementación de esta tecnología se realice de manera ordenada y segura. Las nuevas pautas también incluyen procedimientos específicos para los servicios de emergencia, quienes deben ser informados sobre cómo identificar, asegurar y actuar en caso de incidentes con estos vehículos, incluyendo situaciones de remolque y manejo de incendios.
Supervisión y cumplimiento permanente
La seguridad en las carreteras de Pensilvania es una prioridad para PennDOT, por lo que las empresas que operen vehículos automatizados tendrán la obligación de proporcionar informes continuos sobre accidentes, problemas de seguridad o cualquier otra situación relevante. Este reporte continuo incluye la notificación de incidentes graves, como accidentes con lesiones, fallecimientos o daños significativos a la propiedad.
Estas medidas fueron el resultado de un trabajo conjunto entre PennDOT, la industria de vehículos autónomos y el Comité Asesor de Vehículos Altamente Automatizados, creado en 2018 para ofrecer asesoramiento sobre investigaciones y mejores prácticas en el sector. Además, se incorporaron aportes del público a través de un periodo de comentarios para perfeccionar las regulaciones.
Con este marco regulatorio, Pensilvania se transforma en uno de los estados pioneros en la integración de los vehículos sin conductor en sus rutas.