El nuevo hombre fuerte de Siria disuelve varias milicias rebeldes y las une bajo el control del Ministerio de Defensa
12/24/2024 12:13 PM
DAMASCO.- El líder de facto de Siria, Ahmed al-Sharaa (mejor conocido por su nombre de combatiente Abu Mohammed al-Golani), llegó el martes a un acuerdo con antiguos jefes de facciones rebeldes para disolver todos los grupos y consolidarlos bajo el Ministerio de Defensa, según un comunicado de la nueva administración.
Aunque no hay muchos detalles sobre lo que implica el acuerdo ni sobre qué grupos rebeldes están involucrados, el líder del grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS), Al-Sharaa, ya había hablado de su objetivo de unir a todos los combatientes bajo un ejército nacional. El líder de facto de Siria ha pasado los días transcurridos desde la caída del régimen de Al-Assad reuniéndose con los líderes de varios grupos.
"Siria debe permanecer unida y debe haber un contrato social entre el Estado y todas las sectas para garantizar la justicia social", dijo Al-Sharaa el 17 de diciembre, añadiendo que "todos estarán sujetos a la ley".
El primer ministroMohamed al-Bashir había dicho la semana pasada que el ministerio se reestructuraría con antiguas facciones rebeldes y oficiales que habían desertado del Ejército de Bashar al-Assad.
Los grupos rebeldes que se unieron a HTS para derrotar a Al-Assad eran un complejo mosaico de combatientes, respaldados a veces por potencias extranjeras que se concentraban en luchar contra diferentes enemigos, a veces incluso entre ellos.
Al-Sharaa se enfrenta a la ardua tarea de intentar evitar enfrentamientos entre los numerosos grupos que conforman el país.
Los nuevos gobernantes del país nombraron ministro de Defensa del gobierno provisional a Murhaf Abu Qasra, figura destacada de la insurgencia que derrocó a Al-Assad.
Entre las minorías étnicas y religiosas históricas de Siria se encuentran los kurdos musulmanes y los chiítas -que durante la guerra civil temieron que cualquier futuro Gobierno islamista sunita pusiera en peligro su modo de vida-, así como los cristianos ortodoxos sirios, griegos y armenios, y la comunidad drusa.
El líder rebelde dijo a los dirigentes occidentales que el grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS) que él dirige, antigua filial de Al-Qaeda, no buscará venganza contra el antiguo régimen ni reprimirá a ninguna minoría religiosa. El movimiento, que sigue en la lista de organizaciones terroristas del Departamento de Estado, ha tratado en los últimos años de reinventarse como un movimiento islamista centrado en cuestiones locales, en lugar de en la yihad transnacional.
Sharaa se ha reunido con altos funcionarios de países occidentales y de Oriente Medio en las últimas semanas, mientras busca lograr legitimidad internacional y las potencias mundiales reconstruyen sus relaciones con Siria tras la caída de Al-Assad.
Los rebeldes sirios tomaron el control de Damasco el 8 de diciembre, obligando a Al-Assad a huir tras más de 13 años de guerra civil y poniendo fin a décadas de control de su familia.
Agencias Reuters, AFP y diario The Washington Post