Ante la continuidad de las protestas, el Gobierno dictó la conciliación obligatoria en la ex-AFIP y los gremios acudirán a la Justicia

https://resizer.glanacion.com/resizer/v2/25XQMLNKFVHQXATSU5GVZXSUHA.JPG?auth=bd7780524cdd35f29044f5c90838a54d224ff669947576373dfa0367050a9790&smart=true&width=2000&height=1333

El Gobierno no logró contener las protestas y reclamos de los gremios la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA, antes AFIP) y este martes decidió dictar la conciliación obligatoria por el plazo de 15 días. Como adelantó LA NACION, desde la Casa Rosada esperaban abrir una instancia de diálogo con los tres sindicatos que agrupan a los empleados del ente recaudador y hasta apostaban porque los nuevos directores designados en la Aduana y la DGI probaran su expertise en las negociaciones, para aplacar a sus subordinados. Pero eso no sucedió.

"El Gobierno nacional, a través de la Secretaria de Empleo, Trabajo y Seguridad Social de la Nación, que se encuentra bajo la órbita del Ministerio de Capital Humano, a instancias de las autoridades de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA, ex-AFIP), dictó la Conciliación Obligatoria en el marco de las medidas de fuerza adoptadas luego de la reconversión del organismo. La medida será por 15 días, los cuales pueden ser prorrogados", comunicó la Presidencia a través de un comunicado.

"Con la intención de impedir que se extiendan las medidas de fuerza, el Gobierno exhorta los sindicatos del organismo a terminar con las medidas de fuerza que obstaculizan el normal funcionamiento del órgano recaudador. A su vez, la Secretaría de Trabajo convocó a las partes a una audiencia el día lunes 4 de noviembre de 2024 a las 11 horas", completa el parte oficial.

La semana pasada, el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció la disolución de la AFIP y su reemplazo por ARCA. También, anticipó la desvinculación de 3155 de los 22.200 empleados del ente recaudador. Dijo que se trataba de los empleados nombrados durante el gobierno de Alberto Fernández.

Desde entonces, los gremios de la ex-AFIP lanzaron paros con presencia en los lugares de trabajo, apagones informáticos y asambleas. Las medidas afectaron no solo los trámites presenciales y virtuales de los contribuyentes, sino también ocasionaron este lunes demoras de hasta dos horas para los pasajeros de viajes internacionales que ingresaron al país a través del aeropuerto de Ezeiza.

La protesta –que comenzó a las 10 y terminó a las 14– de los trabajadores agrupados en el Sindicato Único del Personal Aduanero de la República Argentina (Supara) se repitió hoy en Ezeiza, aunque el panorama distó mucho de lo esperado. Los pasajeros salieron del sector de escáneres de la Aduana, el último paso para el arribo al país, como en un día normal.

El Gobierno confiaba en que sería central para manejar la crisis el desembarco de los nuevos directores del organismo, Andrés Vázquez, al frente de la Dirección General de Aduanas (DGA), y José Velis, como cabeza de la Dirección General Impositiva (DGI). Ambos fueron designados el viernes pasados y ya asumieron sus cargos. En las filas libertarias esperan que Vázquez y Velis, que conocen internamente el organismo desde hace años y a buena parte de su personal, podrán amortiguar las reacciones.

Sin embargo, este martes decidió dictar la conciliación obligatoria, lo que le dará a Vázquez y Velis un plazo de 15 días para buscar una salida a la crisis.

A los tribunales

Noticia en desarrollo

×