La Navidad de Kate Middleton tras su año más complicado: planes familiares, una fiesta numerosa y una interrupción obligatoria
Ayer a las 02:40 PM
Al fin llegó la Navidad, tiempo de paz y amor por excelencia, y una época en la que se suele hacer balance del año que en breve nos abandonará. En ese sentido, es probable que el de Kate Middleton, princesa de Gales, no sea especialmente positivo teniendo en cuenta las malas pasadas que su frágil salud le jugó últimamente. Sobre todo desde que en el mes de enero se sometió a una misteriosa operación abdominal y luego, tras semanas de rumores y especulaciones, se vio obligada a grabar un vídeo en el que ella misma confesaba que padecía cáncer y debía someterse a un tratamiento de quimioterapia.
Su desaparición del foco mediático se convirtió en un asunto de calado internacional y empezó a perjudicar a la imagen de la familia real británica —que andaba preocupada por la situación personal de la que, según las encuestas, es hoy día la "favorita" entre los miembros de la monarquía—. Fue en el mes de junio cuando la esposa del príncipe Guillermo regresó a la escena pública con un 'cameo' en la ceremonia del Trooping the Colour (Desfilando los Colores). Aunque ya entonces ella dejó claro que no pensaba retomar su agenda pública a corto plazo, puesto que no se encontraba "fuera de peligro".
Y en el mes de septiembre emitió un comunicado diciendo que había terminado su quimioterapia, pero que seguía enferma. "Mi camino hacia la recuperación aún es muy largo y la curación total está muy lejos", apuntó una mujer que en estas últimas semanas se ha dejado ver en algún que otro acto oficial donde no pasó desapercibido su rostro profusamente maquillado y de aspecto fatigoso. "No volverá a trabajar de la misma forma durante mucho tiempo", comentaba hace solo unos días una fuente cercana a nuestra protagonista. "Ahora mismo está centrada en sí misma y en su familia, como es lógico".
Las vacaciones de Navidad de los príncipes de Gales: tranquilos y en familia
La periodista Jennie Bond tiene claro que la princesa se esforzará por crear estos próximos días recuerdos inolvidables para los suyos. "Creo que esta Navidad y Año Nuevo tendrán un significado especial para toda la familia real, pero sobre todo para el Rey [que también padece 'una forma de cáncer'] y la Princesa de Gales", ha asegurado a OK! la que fuera corresponsal de la casa real británica de la BBC durante 14 años. "Han superado lo que Guillermo ha descrito como 'el año más duro de mi vida', y sin duda este ha sido un año aún más brutal para su padre y su mujer".
En cuanto a sus tres hijos ―el príncipe George (segundo en la línea de sucesión al trono), la princesa Charlote y el príncipe Louis ―, añade la periodista, "puede que esta sea su forma de darles las gracias por haber aguantado tan bien durante una época tan dura. Como en tantas familias con niños pequeños, la ilusión por la Navidad empieza pronto. No me cabe duda de que tendrán la cabeza llena de pensamientos sobre Papá Noel cargando todo tipo de regalos en su trineo".
Es costumbre que los Príncipes de Gales se alejen de la escena pública en diciembre y enero para disfrutar de unos días en familia. Esta Navidad, la idea es compartir momentos íntimos con sus retoños en Ammer Hall, una casa de campo del siglo XIX, situada en Norfolk, que les ha servido de refugio en determinados momentos de su vida. "Es en su propia casa familiar donde los Príncipes dejan descontrolarse a sus hijos", apostilla Bond, "así que creo que probablemente abrirán sus calcetines y correrán por su casa a una hora intempestiva de la mañana de Navidad, igual que el resto de niños del país".
Cabe recordar que en 2020 el heredero a la corona británica y su esposa llevaron a sus pequeños al London Palladium para ver el tradicional espectáculo infantil navideño Pantoland, y el año pasado visitaron juntos Lapland UK, en la localidad de Ascot, donde se ofrece una experiencia teatral inmersiva para recorrer distintos rincones de Laponia en Navidad. "Jugamos mucho a juegos de mesa con los niños", comentó una vez Guillermo sobre sus tradiciones navideñas. "Nos encantan el Monopoly y el Risk, duran horas y normalmente todos se enfadan mucho porque pierden".
Una fiesta numerosa para Nochebuena y Navidad
Aunque estos planes tranquilos son los que predominan durante sus vacaciones, siempre hay tiempo para una fiesta. Así lo confirmaba el príncipe Guillermo hace solo unos días, durante su reunión con los soldados y sus familias en Bulford Camp. El hijo de Carlos III señaló que su familia está organizando una gran fiesta para celebrar los días 24 y 25 de diciembre, como ya es tradición. "Estaremos en Norfolk, en Sandringham. Seremos 45 en Navidad. No será tranquilo. Será ruidoso", afirmaba. Un evento al que, según una fuente cercana al clan, no estarían invitados ni el príncipe Harry ni su mujer Meghan Markle —que pasarán estas fiestas en Estados Unidos y llevan sin celebrarlas con la familia del primero desde 2018, año de su boda—.
Los reyes Carlos III y Camila serán los anfitriones de esta gran fiesta de Nochebuena. Y el día de Navidad, tras la tradicional entrega de regalos a los niños, el monarca encabezará la procesión hasta la iglesia de Santa María Magdalena, en la finca de Sandringham, donde asistirán a un servicio religioso antes de regresar a casa para disfrutar del tradicional almuerzo con pavo de Navidad como plato principal. Tras el festín, verán por televisión el discurso navideño del Rey, que este año está generando gran expectación debido a todo lo que está sucediendo de puertas de palacio para adentro.
El príncipe Guillermo y Kate Middleton interrumpen sus vacaciones de Navidad
Sin embargo, antes de estos planes y fiestas, el príncipe Guillermo y Kate Middleton han tenido que interrumpir sus vacaciones por un motivo muy importante. Los príncipes de Gales se han asociado con Norfolk and Waveney Mind, una organización benéfica que tiene como objetivo brindar apoyo y recursos en materia de salud mental. Concretamente, se centra en la localidad en la que se encuentra su casa de campo, Anmer Hall.
Según informa 'Hello!', la salud mental resentida está muy extendida en las comunidades rurales. El primer paso es crear un plan piloto, que se estrenará el próximo año y durará hasta 2027, para aplicar en estas comunidades rurales y agrícolas, intentando mejorar el ánimo de las personas residentes en esta zona.
Para empezar a desarrollarlo, la prioridad es crear y ocupar dos puestos: un coordinador de salud mental rural y un consejero. Además, se organizarán sesiones destinadas a padres e hijos pequeños, mujeres con menopausia o grupos de hombres, en las que estarán presentes un asesor presencial y para las que no hará falta pedir cita previa. Este proyecto podrá ser usado por los vecinos y las personas "que viven y trabajan en la finca de Sandringham", según informó el Palacio de Kensington.
Guillermo y Kate participaran en él cofinanciando su creación, algo que ha entusiasmado a Sonja Chilvers, directora ejecutiva de la entidad. "Estamos encantados de trabajar con el príncipe y la princesa de Gales, que conocen bien nuestras comunidades del noroeste de Norfolk , y estamos ansiosos por ver la diferencia que este piloto hará en la salud mental de la población local", ha afirmado. Este compromiso de la pareja real no es nada nuevo, ya que no es la primera vez que apoyan a iniciativas y entidades que defienden la salud mental.
De hecho, Kate emitió un emotivo discurso hace unas semanas con motivo del Día Mundial de la Salud mental. "Hablar simplemente de salud mental no es suficiente. Guillermo y yo creemos que debemos hacer todo lo posible como sociedad para ayudar a los jóvenes a desarrollar las habilidades emocionales y sociales que necesitan para una buena salud mental y para prosperar en el mundo que los rodea", afirmaba en un evento en Birmingham. De esta manera, los futuros reyes han tenido que hacer una pausa en su descanso navideño por una buena causa que sienten muy cercana a su corazón.