Javier Ungría revela el mayor miedo de Elena Tablada durante su matrimonio y señala a David Bisbal

Javier Ungría y Elena Tablada decidieron separarse en el año 2022, sin embargo, dos años después sigue copando titulares su ruptura. Veinticuatro meses más tarde seguimos descubriendo detalles acerca de una relación que parecía sólida, pero que terminó de la peor de las maneras: en juicios y batallando por la custodia de su única hija en común. Tras la entrevista que Elena concedió asegurando que Javier Ungría tenía manía a su hija mayor, él se ha sentado en un plató de televisión.

La razón por la que acabó su matrimonio

El empresario está cansado. No da crédito a la versión de Elena Tablada y, por esa razón, ha dado un puñetazo sobre la mesa en '¡De Viernes!'. Es allí donde se ha defendido de las acusaciones de Elena y donde ha revelado que se casó "muy enamorado de ella". Lo que quizás no imaginaba era el giro que iba a dar su extinto matrimonio cuatro años después de darse el 'sí, quiero'. "La relación se ha ido desgastando por parte de los dos por no haber ido cuidándola. No creo que sea justo volcar la responsabilidad en una parte", explica.

Elena Tablada buscaba un ambiente constantemente alegre, según su exmarido

Solo unos segundos después de esta primera confesión, Javier Ungría habló sobre la hija mayor de Elena Tablada, la cual nació fruto de su relación con David Bisbal. Aunque reconoce que hubo momentos en los que fue complicada, insiste en que puso todo de su parte para que esta mejorara. "Soy una persona más estricta, más seria, me gustan los modales y Elena no es tanto así. A mí en cierta medida no se me permitía (...) poner normas. Eso no gustaba mucho. Elena tenía el miedo de que la niña se quisiese ir a vivir con su padre, entonces no quería un ambiente que no fuese constantemente alegre", desliza Javier. 

Javier Ungría reconoce que la relación con la hija de Elena Tablada fue complicada

El exsuperviviente entiende que la hija de Elena Tablada no aceptara en un principio su llegada a la casa de su madre, pero siempre confió en que las aguas volverían a su cauce. No obstante, no fue así. "La relación con su hija mayor fue un poco complicada por temas naturales. Al final yo llegaba a una casa donde desplazaba un poco a la niña, en cierto aspecto, y le quitaba atención de su madre. Tenía la tranquilidad que si las cosas se hacían de manera adecuada todo se arreglaría". 

"Es como un patrón que se va repitiendo"

Javier Ungría es incapaz de entender la razón por la que ha pasado a ser el "malo de la película", una hoja de ruta que está convencido de que Elena Tablada repite con todas sus exparejas. "Ahora todo es malo respecto a mí y cuando yo llegué todo lo malo era lo anterior. Es como un patrón que se está repitiendo", asegura. Es, por ello, por lo que pide reflexionar a todos aquellos que han escuchado a Elena Tablada: "Esperar dos años y medio para decir que yo era mala persona con su hija no le encuentro demasiada explicación, es poner excusas. Dejar entrever que yo no he sido adecuado para su hija". 

Javier Ungría reprocha a Elena Tablada que criticara a su madre

Y, aunque hay muchas cosas que le han dejado heridas todavía abiertas, Javier Ungría hay algo que todavía no le ha podido perdonar a Elena Tablada. "Le tendría que haber dado vergüenza haber hablado así de mi madre. Mi madre ha sido una persona brillante con ella", reprocha Javier. Pero, ¿qué dijo la diseñadora de joyas sobre ellas? Recordemos sus palabras, pues en ellas cargaba tanto contra su exsuegra como contra sus excuñadas. "La madre es muy guapa, de cara es de una manera, es alegre pero luego hay otra cara. A las hermanas... no tenía las hermanastras de las Cenicienta, que también vienen con la manzana, pero esta envenenada", contó Elena Tablada.

Fue justo después de estas declaraciones en MTMAD cuando Javier Ungría emitió un comunicado defendiendo a su familia. No pensaba consentirlo más. "Ojala pudiese volver a nacer porque, si así fuese, volvería a elegir a todos y cada uno de los miembros de mi familia. No solo por su brillo interior, si no por ser empáticos, generosos, cercanos, dispuestos, predispuestos, amables leales, educados (que parece un delito), divertidos, extraordinarios hijos, padres, tíos y hermanos. Yo sé la suerte que tengo... mi hija aún no. Pero todo llega". 

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