Entramos en Skaugum, la residencia oficial de Haakon y Mette-Marit y el escenario de las fiestas "salvajes" de Marius Borg

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La Familia Real de Noruega continúa en el punto de mira a raíz de los escándalos protagonizados por el hijo mayor de Mette-Marit, Marius Borg Høiby. En los últimos días, las prensa del país ha desvelado que el primogénito de la Princesa heredera reunía a los suyos, entre los que se encuentran personas con varios antecedentes penales, en Skaugum, la residencia oficial del Príncipe Haakon y su madre. Una vivienda que ha sido saqueada tras una de esas "salvajes" celebraciones. A continuación, entramos en ella.

Skaugum es la residencia oficial del Príncipe Haakon y Mette-Marit, a la que se mudaron inmediatamente después de su boda. Está situada en Asker, a tan solo unos 20 kilómetros de Oslo. Tiene sus orígenes en el siglo XIX y fue adquirida en 1929 por el entonces Príncipe heredero Olav y su mujer, la Princesa Märtha. Un año después, la casa original fue destruida en un trágico incendio y tuvo que ser de nuevo construida. La nueva vivienda fue diseñada por el arquitecto Arnstein Arneberg. En 1945 fue devuelta a la Familia Real después de haber sido ocupada por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

Además de ser su residencia oficial, Skaugum es uno de los lugares donde se llevan a cabo importantes reuniones oficiales y eventos. La propiedad cuenta con amplias zonas ajardinadas, bosques y una mansión en la que se unen la tradición y la modernidad. Tras su mudanza, la vivienda fue sometida a una gran reforma y se convirtió en un apartamento de lujo. A lo largo de los años, el matrimonio nos ha mostrado unas pinceladas del interior de la misma.

A este respecto, se trata de una vivienda en donde predominan los muebles blancos, al más puro estilo escandinavo. Durante la pandemia, pudimos ver el interior de algunas de las estancias. Especialmente, del despacho. Se trata de un rincón de lo más pintoresco en donde se ve una clara mezcla de estilos. Hay muebles que van de lo clásico a lo vanguardista. Destaca el escritorio de madera rústica, así como las molduras de las paredes, que son de color azul. Además, hay una combinación de tonos que van de los grises a los dorados (presentes en los marcos de las fotos). 

Se podría decir que el despacho clásico nada tiene que ver con el comedor, donde predomina la paz visual y la clara apuesta por la modernidad. Este espacio diáfano cuenta con dos amplios sofás grises que se encuentran dispuestos frente a una gran mesa de madera. También destaca la lámpara de ratán natural, que combina a la perfección con las paredes blancas, así como grandes obras de arte. En concreto, se trata de un cuadro en el que vemos una fotografía en blanco y negro de uno de los fiordos del país. 

En cuanto a la vivienda privada de los Príncipes herederos de Noruega y sus hijos predominan los amplios y luminosos espacios. Aunque tiene una mención especial la gran biblioteca que hay en una de las habitaciones, en la que también se encuentra una mesa de pimpón. Este espacio fue revelado por una de las personas que acudió a una de las fiestas de Marius, quien grabó el interior de Skaugum y un medio noruego se hizo eco del mismo. 

15 hectáreas y más de 140 estancias

El terreno tiene 15 hectáreas y también hay varios edificios que se usan como establos. La casa en la que viven los Príncipes Haakon y Mette-Marit tiene 1.000 metros cuadrados, en los que encontramos más de 140 estancias. No está abierto al público porque es de uso privado, pero algunas estancias se han podido ver a través de sus redes sociales y visitas oficiales.

Una de las zonas más características de Skaugum es la fachada principal. Es aquí donde cada 17 de mayo, Día Nacional de Noruega, salen a la puerta de su casa, junto a sus hijos, para saludar y ver pasar el tren con los niños del pueblo de al lado.

El hijo de Mette-Marit, investigado por conducción imprudente en los terrenos de Skaugaum

Un medio noruego se hacía eco de un vídeo de Marius Borg Høiby en el que aparecía conduciendo a toda velocidad por los terrenos de la casa, hasta el punto de chocarse y abollar el vehículo dentro de la propia finca. En octubre del año pasado, el hijo de Mette-Marit fue denunciado por exceso de velocidad al entrar en el jardín de Skaugum. Él mismo publicó un vídeo en sus redes sociales en donde se le puede ver conduciendo a 91 km/h, en una zona cuyo límite es de 50. En ese momento, la policía recibió un aviso y calificaron el caso como "conducción negligente". Pero al no tener pruebas desestimaron el caso. 

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